El Pirineo aragonés es uno de los lugares más bonitos y sorprendentes de España, ya que ofrece una experiencia visual y sensorial única, con cumbres impresionantes, cascadas de ensueño, ríos serpenteantes y cañones que desvelan pequeños secretos geológicos. Explorar este rincón de Aragón y descubrir que ver en el Pirineo aragonés es adentrarse en la naturaleza en su estado más puro y fascinante.
Pero además, cuentan con una gran riqueza cultural y de tradiciones, con pueblos que parecen congelados en el tiempo, con sus calles empedradas y sus casas de piedra que narran siglos de historia.
Por lo tanto, visitar y descubrir que ver en el Pirineo aragonés no solo es un viaje a través de paisajes naturales únicos, también es un encuentro con la autenticidad de la cultura de la zona.
Pirineos aragoneses. Lugares imprescindibles y alucinantes
En el Pirineo aragonés encontraréis 4 comarcas, cada una con su propia esencia. La Ribagorza, montañosa y salvaje, alberga el El Parque Natural Posets Maladeta. Sobrarbe, epicentro biodiverso, donde destaca con el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. Alto Gállego, entre Monte Perdido y Sierra y Cañones de Guara, con precioso Valle del Tena, pueblos como Lanuza o la espectacular cascada de Orós Bajo.
Y nos queda La Jacetania, en la parte noroccidental, entre Huesca y Zaragoza, con el río Aragón, Jaca o el monasterio de San Juan de la Peña.
Como puedes apreciar, estas regiones albergan innumerables rincones que visitar y disfrutar. En este artículo, te animamos a descubrir aquellos que no deberías perderte durante tu visita. ¡Te desvelamos algunos de los lugares imprescindibles que ver en el Pirineo aragonés! ¡Vamos allá!
1- Valles Occidentales y Estación de Canfranc
Explorar las casi 30000 hectáreas del Parque Natural de los Valles Occidentales es adentrarse en un escenario natural de ensueño, un paisaje de montañas, valles y frondosos bosques donde podéis visitar rincones como la Selva de Oza, Aguas Tuertas o el Ibón de Estanés.
Un entorno excepcional que además está repleto de una biodiversidad única y de pintorescos pueblos como Aísa o Ansó.
También podéis acercaros hasta la Estación Ferroviaria Internacional de Canfranc que surgió como parte del proyecto de unir España y Francia a través de un paso fronterizo en los Pirineos. Fue inaugurada en 1928 y declarada Bien de Interés Cultural en 2002.
En enero de 2023 se convirtió en un complejo que incluye un hotel de lujo, spa, restaurantes, biblioteca y áreas culturales.
2- Jaca y el Valle de Aragón
Jaca, ubicada en el Valle de Aragón, es una joya histórica de los Pirineos, una ciudad que es una fusión única de historia y encanto, con calles adoquinadas y plazas de lo más animadas. No puedes dejar de visitar su impresionante Ciudadela o la Catedral de San Pedro, dos destacados hitos arquitectónicos.
Lugares imprescindibles que ver en el Pirineo aragonés
El Valle de Aragón ofrece paisajes sin igual, rutas de senderismo, deportes de aventura o pueblos como Santa Cruz de Serós o Borau rodeados de la belleza natural de los Pirineos.
3- San Juan de la Peña
A unos 25 km de Jaca se encuentra San Juan de la Peña, un monasterio con una historia y leyendas que se remontan al siglo X.
La fusión de arquitectura románica y entorno natural exuberante hace de San Juan de la Peña un lugar único y fascinante. Además, fue un punto clave en el Camino de Santiago y está vinculado a la leyenda del Santo Grial.
No os debéis perder su iglesia prerrománica, el Panteón de Nobles y un magnífico claustro románico. También alberga la capilla gótica de San Victorián y el Panteón Real neoclásico del siglo XVIII.
En las cercanías, encontraréis la Iglesia de Santa María en Santa Cruz de la Serós, antiguo monasterio benedictino femenino que albergó a mujeres influyentes entre los siglos XI y XII.
También podéis visitar el Monasterio Nuevo y el Centro de interpretación de San Juan de la Peña con una innovadora estructura permite a los visitantes pasear sobre un suelo de cristal y admirar, bajo sus pies, las diversas estancias que constituían el Monasterio: desde las habitaciones de servicio y la cocina hasta la botica, el refectorio, la bodega y la despensa.
Sin duda, uno de los lugares imprescindibles que ver en el Pirineo aragonés.
4- Ibones del Pirineo aragonés
No puedes perderte la experiencia de descubrir los ibones en el Pirineo aragonés. Estos lagos de origen glaciar, la mayoría en la alta montaña, ofrecen distintas opciones de acceso. Algunos son accesibles incluso en coche, como el Ibón de los Baños, y para llegar a otros necesitarás realizar una ruta más intensa y desafiante.
De todas formas, la mayoría requiere rutas de senderismo, a veces con elevado desnivel. Os recomendamos algunos como el Ibón de Plan, el Ibón de Anayet, el Ibón de Toro, como continuación del sendero después de la cascada de Aigualluts o el precioso Ibón de Bernatuara.
Son un auténtico espectáculo, atalayas sin igual y, en muchas ocasiones, espejos cristalinos que capturan las cumbres, las nubes y los prados que los rodean.
5- Cascada de Cola de Caballo
La Cascada de Cola de Caballo es un salto de agua ubicado en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.
La cascada debe su nombre a la forma que adopta el agua al caer desde una gran altura, dividiéndose en múltiples arroyos que se asemejan a la cola de un caballo.
El acceso a la Cascada de Cola de Caballo se realiza a través de la Ruta Cola de Caballo, en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, una experiencia clásica y popular en los Pirineos aragoneses.
El sendero es realmente increíble, ya que transcurre entre los cañones de Ordesa y culmina en la espectacular cascada. Puedes elegir entre la ruta lineal, que abarca 17 km y 5 horas, o la circular por la Senda de los Cazadores, con 21 km y 7 horas de duración.
Ambas opciones ofrecen una inmersión total en la belleza natural de la región. Son rutas largas, pero merecen mucho la pena. Sin duda, una aventura imperdible para los amantes de la naturaleza y el senderismo y uno de los lugares más impresionantes que ver en el Pirineo aragonés.
Os lo contamos con todo detalle en RUTA COLA DE CABALLO POR LA SENDA DE LOS CAZADORES. ORDESA
6- Llanos de La Larri y Cascada del Cinca
La ruta de la Cascada del Cinca nos sumerge en uno de los valles glaciares más asombrosos de los Pirineos aragoneses, en el Valle de Pineta del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. Siguiendo el curso del río Cinca, que da vida a esta majestuosa cuenca, alcanzamos una de las cascadas más impresionantes de Huesca.
La abundancia de bosques, pequeños saltos de agua y los prados de los Llanos de La Larri hacen de este recorrido una experiencia fascinante. Puedes optar por la cómoda ruta del camino de Marboré para visitar solo la Cascada del Cinca o, si buscas una experiencia más completa, explorar también los Llanos de La Larri.
Te lo contamos en RUTA CASCADA DEL CINCA Y LLANOS DE LA LARRI
7- Cañón de Añisclo. Otro de los lugares imprescindibles que ver en el Pirineo aragonés
El Cañón de Añisclo, integrado en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido desde 1982, es una profunda grieta labrada, a lo largo de millones de años, por las aguas del río Bellós.
El cañón ofrece paisajes inolvidables con paredes rocosas que se elevan verticalmente y alcanzan alturas considerables. La flora y fauna en la zona son abundantes, ya que encuentran refugio en este entorno con bosques frondosos, asombrosas formaciones rocosas y cascadas.
La ermita de San Úrbez añade un toque histórico y recuerda al santo pastor que habitó esta cueva en el siglo VIII. Hay numerosas rutas de senderismo que permiten a los visitantes explorar y disfrutar de la belleza natural del Cañón de Añisclo. Precisamente, una de las más recomendables, sencillas y conocidas para explorar el cañón es la Ruta de la ermita de San Úrbez. ¡Así que no os la perdáis!
8- Las Ermitas de Tella
Descubrir las Ermitas de Tella es un viaje lleno de misterio y leyenda, donde santos, brujas y magia se entrelazan en una fascinante ruta.
Aquí, a través de un precioso y sencillo sendero podrás visitar tres ermitas estratégicamente construidas en Sobrarbe, Huesca, a 1.340 m de altura, que sirven como una barrera defensiva frente a las «fuerzas oscuras».
La ruta parte del pueblo de Tella, un pequeño y bonito rincón que cuenta con chimeneas decoradas con espantabrujas para alejar las malas energías. La influencia de la brujería en la región dio lugar al Museo de la Bruja, que revela objetos e historias sobre aquelarres, embrujos y leyendas.
Un rincón fascinante entre los lugares que ver en el Pirineo aragonés.
Toda una aventura que os contamos en ERMITAS DE TELLA. UNA RUTA MÁGICA Y PROTECTORA EN HUESCA
9- Benasque, Aínsa, Broto y otros pueblos
Otro de los lugares imprescindibles que ver en el Pirineo aragonés son sus encantadores pueblos repletos de cultura, tradición y una preciosa arquitectura.
No debéis dejar de visitar Benasque, puerta al Parque Natural de Posets – Maladeta, con joyas como el Palacio de los Condes de Ribagorza y el puente medieval sobre el río Ésera.
También Aínsa, declarada Conjunto Histórico-Artístico, que enamora con su arquitectura medieval a la orilla de los ríos Ara y Cinca. O Broto, abrazado por el río Ara y cercano al Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, que cautiva con la Casa del Valle del siglo XVI, la iglesia de San Pedro Apóstol o la impresionante cascada de Sorrosal.
Pero hay muchos más… descúbrelos en 18 PUEBLOS DE HUESCA BONITOS Y CON ENCANTO
10- Forau de Aigüalluts. Otro de los lugares imprescindibles que ver en el Pirineo aragonés
El Forau de Aigüalluts es uno de los parajes naturales imprescindibles que ver en el Pirineo aragonés, concretamente en el Parque Natural Posets-Maladeta. Es una singular formación geológica, un gran agujero en la montaña que actúa como sumidero de las aguas provenientes del glaciar del Aneto. El agua se filtra a través de la montaña, convirtiéndose en un río subterráneo y reaparece en la zona de Eriste.
Para llegar hasta él y a una preciosa cascada con el mismo nombre debéis realizar la ruta Forau de Aigualluts. No tendréis ningún problema, ya que, además de una auténtica preciosidad, es una de las rutas más sencillas del pirineo Aragonés.
Tenéis más información en RUTA FORAU DE AIGUALLUTS VISITANDO EL IBÓN DE COLL DE TORO
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11- Pico Aneto y otras cumbres del Pirineo aragonés
Si os gusta subir a las cumbres y realizar rutas de montaña, el pirineo aragonés es una invitación a un mundo de aventuras en las alturas y de paisajes increíbles. El Pirineo alberga más de 212 cumbres que se elevan por encima de los 3.000 metros, y la mayor parte de estas montañas se encuentran concentradas en el Pirineo aragonés.
Coronando este reino alpino se alza el Pico Aneto, el monarca indiscutible de los Pirineos y la cima más alta de la cordillera, con 3,404 metros. Su ascenso no solo promete la conquista de la montaña más elevada, sino también la inmersión en un mundo de glaciares centenarios y panorámicas inolvidables.
El Pico Posets, también conocido como «la Pirámide», con su silueta distintiva y aura mística, es la segunda montaña más alta de los Pirineos. Otro auténtico deleite para los senderistas y amantes de la montaña.
El Pico Perdiguero es famoso por sus afiladas crestas y por ser otro de los «tres miles» del Pirineo, ya que supera los 3,000 metros de altitud. La ascensión al Pico Perdiguero ofrece desafíos emocionantes y vistas impresionantes.
El Pico Maladeta. Situado cerca del Aneto, el Pico Maladeta forma parte de la misma cadena montañosa. Es conocido por sus impresionantes lagos glaciares, un recordatorio constante de la belleza salvaje que todavía podemos encontrar en los Pirineos aragoneses.
Estos solo son algunos de los más representativos pero hay otros muchos como el magnífico Monte Perdido, con 3.348 metros, el Pico Plan de Marmorés / Marboré con 3.251 metros y un largo etcétera. Sin duda, todo un paraíso para los amantes de las alturas.
12- Estaciones de esquí
El Pirineo Aragonés es también ideal para los amantes de los deportes de invierno y, en concreto, del esquí y la nieve. Sus estaciones ofrecen variedad de pistas, calidad de nieve, buenos servicios y un entorno natural impresionante.
Las estaciones de esquí del Pirineo aragonés son:
Cerler:
Ubicación: Valle de Benasque, la estación más alta del Pirineo Aragonés.
Atractivos: Variedad de pistas para todos los niveles y conexión con el Parque Natural de Posets-Maladeta.
Formigal:
Ubicación: Valle de Tena, una de las estaciones más grandes de España.
Atractivos: Amplia oferta de pistas, modernas instalaciones y diversas actividades fuera de las pistas.
Panticosa:
Ubicación: Valle de Tena.
Atractivos: Pistas diversificadas, entorno natural encantador, y acceso al Balneario de Panticosa para quienes buscan relajación adicional.
Astún – Candanchú:
Ubicación: Valle de Aragón, cerca de la frontera con Francia.
Atractivos: Estación clásica, una de las más antiguas de España, con una buena variedad de pistas y con paisajes impresionantes
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