Phu Quoc
Cuando empezamos a viajar siempre echábamos de menos que alguien nos hablase de lo bueno y de lo malo de algunos lugares. La información sobre algunos destinos a veces nos hace plantearnos algunas cuestiones ¿Todos los viajes son iguales? ¿Siempre vamos a los mismos sitios? ¿Todo es maravilloso?
Phu Quoc
En ocasiones, hay sitios que nos decepcionan, hay lugares que no son tan idílicos.
Antes de ir a Phu Quoc consultamos varias páginas web en las que sólo se mostraban fotografías estupendas de playas paradisíacas, pero la realidad en esta isla es muy diferente. En las playas vírgenes están construyendo un sinfín resorts, hoteles y grandes edificios de apartamentos y, además, la isla está llena de plástico.
Pero la basura no da likes. El plástico es un gran problema en Asia y en el mundo. En Phu Quoc es realmente abrumador ver tanta basura en las calles.
Lo peor de Phu Quoc
Después de recorrer Vietnam en moto decidimos relajarnos una semana en una isla. Nuestra idea era ir a Con Dao como Brad Pitt y Angelina Jolie, pero todo se torció porque si no tienes un jet privado es mucho más complicado llegar a ciertos lugares. Así que decidimos ir a Phu Quoc con nuestra moto en el ferry desde Rach Già.
La llegada fue realmente desoladora. Sólo veíamos plástico y más plástico. El problema es que ellos no tienen una infraestructura para deshacerse de la basura, realmente lo que hacen es concentrarla en otro sitio. Y así se va acumulando más y más y se va tirando al mar y va volviendo a Tierra, es como el día de la Marmota.
Meter la cabeza debajo del agua para ver unos corales maravillosos y encontrarte un montón de bolsas de plástico, recorrer el Mekong con una espléndida luna llena, pero de repente es de día y ha bajado la marea y ¿qué descubrimos? Toneladas y toneladas de plástico. Es un problema de una gran gravedad y del que nos sentimos responsables en cierta medida, como personas y viajeros que somos. Por ello, creemos que debemos hablar de ello y reclamar una mayor implicación internacional para luchar contra esta lacra y, sobre todo, no convertir a ciertos países en los vertederos de otros.
¿Qué es el paraíso? Lo mejor de Phu Quoc
Recorrimos toda la isla en moto. El centro y el sur están repleto de grandes edificios en construcción, muy sucio y bastante masificado.
Pero aún hay esperanza. El 70 por ciento del territorio lo constituye el Parque Nacional que ha sido declarado Reserva de la Biosfera por la Unesco. En el Norte abunda la selva virgen y las especies endémicas. El problema es que es zona militar y el acceso a la selva y a ciertas zonas del Parque está restringido. También encontramos plantaciones de pimienta, “la mejor del mundo” según los carteles que la publicitan. En el Noroeste todavía quedan playas vírgenes, limpias y sin apenas gente.
En el Noroeste de la isla fue donde encontramos nuestro pequeño paraíso. Una playa dentro del Parque en la que pudimos disfrutar de su espectacular vida submarina. Repleta de magníficos corales, con poquita gente y sólo con un puestecito de venta de cocos y refrescos variados.
Desde el primer día hicimos amistad con el señor del puesto de bebidas. Nos entendíamos mediante gestos y a veces utilizábamos algún traductor. Una mañana nos comentó si podíamos coger unas poquitas caracolas mientras buceábamos. Cogimos medio kilo y pescamos una buena sepia. La playa dejó de se una playa desierta.
Primero llegó un amigo camboyano portando una especie de licor de orujo. Pensábamos que serían para el postre, pero no, los chupitos se bebían antes, durante y después de la comida. Hicimos una ofrenda a Buda por los alimentos que habíamos conseguido y recogimos madera por la playa para hacer fuego.
A continuación improvisamos una olla con un coco. Introducimos la sepia, que se coció lentamente en agua de coco con un poco de coca-cola. Si, no sabemos muy bien el por qué pero lo condimentaron con un poquito de coca-cola. Cocimos también las caracolas. Cuando nos dimos cuenta éramos 10 comiendo. La sepia estaba dura como una piedra, pero el sabor era bueno y nos la comimos toda.
Realmente encontramos nuestro espacio y pasamos unos días estupendos en Phu Quoc. La isla es maravillosa pero la estamos destrozando por un turismo irresponsable, que ensucia, que construye desmedidamente, que agota recursos, que destruye la cultura de los pueblos y la naturaleza. Nosotros decimos «no» a ese tipo de turismo y no queremos contribuir a promocionarlo. Por suerte, cada vez somos muchos más los que somos conscientes de la necesidad de colaborar con el medio ambiente para conservar los destinos y lugares que visitamos cuando viajamos. Debemos generar la menor basura posible y practicar un turismo responsable.
Cómo llegar a Phu Quoc
Puedes llegar en barco o en avión. Desde Ho Chi Minh o Hanoi en avión. En ferry desde Hà Tiên o Rach Già. Ojo! Si vas con moto te cobrarán por ella más que a los locales, lo notarás porque los estivadores se reunirán para repartirse el botín.
Qué ver y qué hacer en Phu Quoc
Simplemente recorred la isla y buscad vuestro espacio. Seguro que lo encontraréis. Siempre es bueno ver las cosas por uno mismo, pero nosotros os recomendamos la zona del Noroeste de Phu Quoc.
Dónde alojarse o dónde dormir en Phu Quoc
Visita las playas del Noroeste y alójate en un lugar tranquilo en esta zona. El centro y el Sur son más baratos porque hay más oferta. El turismo es uno de los principales motores económicos de un gran número de países, pero el exceso de visitantes se está convirtiendo en un grave problema.
Visado en Phu Quoc
No hace falta visado, tendréis un mes gratis en la isla, sin importar tu nacionalidad. Es una excepción en Vietnam.
Phu Quoc es una isla hermosa, pero la estamos destruyendo. Nosotros los turistas, nosotros los viajeros, tenemos una gran responsabilidad en todo esto. En el mundo hay muchas Phu Quoc. Cambiemos Phu Quoc, cambiemos el mundo. Al menos nosotros soñamos con hacerlo.
⭐️ Perder el Rumbo. Falsos paraísos: Phu Quoc.
